Comer insectos podría ser una solución a la obesidad, afirma experto.


Muchos de estos animales contienen la misma cantidad de proteínas y minerales que la carne y más grasas saludables que los médicos recomiendan en dietas balanceadas, asegura un informe del Departamento de Silvicultura de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. 


Eva Muller, especialista de la FAO, dijo que restaurantes en Europa comienzan a ofrecer platos con insectos, presentándolos como manjares exóticos. 



El establecimiento danés Noma, por ejemplo, elegido como el mejor del mundo por tres años consecutivos en una encuesta, es conocido por utilizar ingredientes como hormigas y saltamontes fermentados. 



Los autores del informe afirmaron además que la cría de insectos sería menos dependiente de la tierra que el ganado y produciría menos gases de efecto invernadero. 



También crea oportunidades de negocio y exportación para personas de bajos recursos en países en desarrollo, especialmente mujeres, que con frecuencia son las responsables de recolectar insectos en las comunidades rurales. 



Arnold van Huis, de la Universidad de Wageningen, en Holanda, aseguró que las barreras para disfrutar de platos como el yogur de larvas de abejas eran psicológicas. Citó un estudio ciego realizado por su equipo, en el que de cada 10 personas nueve prefirieron albóndigas hechas de carne y lombrices que las compuestas sólo de carne.



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